Todo comenzó un 16 de octubre del año 2012...
Estaba en la red social Facebook (típico actualizando "inicio"), hasta que vi unas fotografías de un amigo Paúl Casal en las cuales estaba en una construcción, con una camiseta sucia y trepado en el techo de una vivienda de emergencia, martillando. Lo primero que se me vino a la mente es: "Yo quiero estar así" sin saber de qué se trataba, cual era el fin, si tenía beneficiarios, etc...
Me contacté con mi amigo, le pregunté sobre sus fotos y me contó del trabajo de la Fundación Techo Ecuador https://www.facebook.com/TECHOecuador?ref=ts&fref=ts!!!
Siempre había querido hacer #Voluntariado, pero no me decidía, porque Fundaciones dedicadas a enfermedades, me considero débil ante esas situaciones y no creo poder ir a hospitales (los detesto) y Fundaciones dedicadas a animales, no me llevo bien con los gatos y no soy amante extrema.
Pero descubrí de la Fundación Techo Ecuador y que les diré: ME ENAMORÉ. A continuación les contaré de su trabajo un poco.
TECHO es una organización presente en Latinoamérica y El Caribe que busca superar la situación de pobreza que viven miles de personas en los asentamientos precarios, a través de la acción conjunta de sus pobladores y jóvenes voluntarios.
TECHO tiene la convicción de que la pobreza se puede superar definitivamente si la sociedad en su conjunto logra reconocer que este es un problema prioritario y trabaja activamente por resolverlo.
Desde ahí soy voluntaria de la Fundación Techo Ecuador, no me considero voluntaria activa, porque no he podido asistir a todas las construcciones, pero en las pocas que he ido y en lo poco que he aportado al Dpto. Comunicación, ha sido suficiente para llegar a la siguiente frase tan significativa:
"Sino vives para servir, no sirves para vivir" - Beata Madre Teresa De Calcuta.
En mi próxima entrada a mi blog, les contaré la experiencia de la primera construcción que asistí, que por cierto fue y será una de las mejores que he tenido en mi vida.
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